¿Cómo?
José Javier en las sesiones de consultoría, con sus clientes,
Abstrae, aborda, acepta, acoge, acompaña, adapta, alienta, apoya, asesora, avanza, ayuda, brinda, capacita, colabora, comprende, conciencia, considera, contextualiza, conversa, crea, cuestiona, descubre, despierta, determina, discrimina, dispone, distancia, empodera, enfrenta, ensaya, enseña, entrena, escucha, especifica, esperanza, estructura, experimenta, expone, extrae, guía, habla, identifica, indica, informa, instiga, investiga, libera, logra, mantiene, medita, modela, moldea, monitorea, muestra, observa, orienta (reorienta), persevera, pone en valor, pregunta, propone, rastrea, reconoce, redirige, refuerza, repite, respeta, responde, se alinea, se compromete, señala, sostiene, sugiere, trabaja, ve, vincula, día a día,
a) en un nuevo autoconocimiento mediante la observación en cada situación, sin apego, con perspectiva deíctica
-observarse, observando con coherencia (la exploración con curiosidad, la identificación, la descripción detallada, el análisis sin reglas rígidas, la comprensión, la toma de conciencia, la conexión)-,
dándose cuenta, sintiendo, sin intentar controlar del flujo y reflujo de las variables que mantienen las relaciones funcionales causantes de cada problema:
b) los eventos privados (los que la propia persona experimenta: mentales y físicos, apetitivos-positivos y aversivos-negativos), casi siempre se intentan controlar y son barreras incontrolables para alcanzar una vida valiosa,
c) los de su mundo mental en interacción con el lenguaje
-eventos verbales (pensamientos, razonamientos, cavilaciones, rumias, malestares, desánimos, sensación de vacío, minusvaloraciones, referencias, identidad elegida y/o asignada, emociones, recuerdos de traumas y experiencias familiares, preocupaciones, vergüenzas, inquietudes, impulsos, conceptualización de reforzadores y castigadores, sentimientos, sensaciones, creencias, ideas, consideraciones, etiquetas, autocategorizaciones, preguntas, dudas sobre uno mismo, sensación de inutilidad, cuestionamientos, interpretaciones, evaluaciones y autoevaluaciones, asunciones incapacitantes, autocríticas, culpabilidad, quejas, juicios, reglas, opiniones, percepciones de las reacciones de los demás, imágenes, sonidos, voces,...)- y
d) los físicos
(palpitaciones, nudo en la garganta, falta de aire, respiración rápida, sudoración, presión en el corazón, temblores, rigidez muscular, dermatitis, sensación de frío, sensación de calor, sequedad en la boca, dolor de estómago, gastritis, colon irritable, mareo, sensación de cansancio, dificultad para hablar con una intensidad y tono habitual, tartamudeo, cara sonrojada, dolor de cabeza, dolor de espalda, falta de hambre,. quedarse paralizado, llorar, no poder estar quieto,...);
e) los eventos externos, circunstancias, situaciones de la vida, fuentes de control de refuerzos y castigos reales, personales, familiares y sociales (históricas, pasadas y presentes);
f) de sus propias fortalezas y cualidades, sus anhelos, necesidades y deseos más íntimos y profundos, sus valores elegidos libremente no al albur de las expectativas de un grupo
(lo que verdaderamente le importa, lo que le da sentido a su vida, más allá del guión de lo entrenado y aprendido por condicionamiento social, lo que su contexto social le indica en cada instante como adecuado, las etiquetas y conceptualizaciones de otros, "sin deberías, ni tendrías que", cumplimiento social),
en el actual momento, a lo largo de su historia y en su futuro (cómo le gustaría vivir una vida mejor al cabo de muchos años);
g) de sus experiencias, acciones (públicas y privadas, positivas y negativas, constructivas o destructivas), siempre temporales, pasajeras y momentáneas, puesto que el futuro de cada persona será diferente del presente;
h) del sentido funcional de sus comportamientos (incluido las interacciones, relaciones, y los patrones, reglas, verbales) en coherencia con sus valores (cómo se siente, si las acciones se encaminan, se acercan, a su vida valiosa o por el contrario le alejan de la vida que desea vivir), y
i) de las consecuencias, las contingencias, y costos personales de sus respuestas en el contexto de sus experiencias
-confrontando entre la experiencia vivida por el cliente y las soluciones propuestas por su mente para resolver los problemas que son resultado del condicionamiento social y cultural (lo que hace o deja de hacer en cada momento, las compatibles, positivas y las negativas, las desadaptativas, desajustadas, ineficaces, inflexibles, limitantes y evitativas)- y
j) en el aprendizaje útil, secuencial, progresivo, o /recuperación/reorientación, con sus recursos, desde sus vivencias, en su contexto vital-existencial
(individual, y dinámico, con perspectiva contextual, de tiempo, lugar y persona del propio yo, con indicadores individuales de progreso),
con comprensión y amabilidad, de un nuevo repertorio pragmático, variable, centrado, creativo y optimizado de acciones que dan sentido a la vida, y producen sentimientos de vitalidad,
k) conductas útiles de desbloqueo, de liberación, de reemplazo, de mejora, de refocalización
(distinguiendo el "yo" como observador de aquí y ahora con el "yo" observador del pasado y del futuro y una identidad asignada cuando no es coherente),
de comportamientos vitales, consecuentes con sus valores, lo que pudiera elegir en un mundo ideal
(sin etiquetar, sin interpretar, ni juzgar, ni comparar, ni evaluar, sin autocuestionarse, con autocompasión, con jerarquía y coherencia entre lo que valora y lo que hacen),
l) estableciendo, conforme a los propios valores, objetivos progresivos específicos, alcanzables, medibles y autoevaluables
-objetivos de realización (requieren pequeños actos de voluntad, de disposición, acciones personalizadas, pequeñas y comprometidas, a corto plazo, aquí y ahora) y objetivos de resultado (acciones a largo plazo)-
que aceleran lo que queremos aumentar y que deceleran, frenan, movimientos de alejamiento divergentes con sus valores,
m) por experiencia directa en dirección a reforzadores (preferentemente naturales) valiosos y adaptativos (secuencialmente: primero refuerzos pequeños y rápidos para competir con la evitación y después más grandes y de más valor), no por reglas rígidas y literales (no se trata de sustituir unas reglas rígidas "negativas" por otras reglas rígidas "positivas"), y
n) hábitos funcionales de acción basados en sus valores (amplios, útiles, comprometidos y coherentes y sostenibles a largo plazo), que contribuyan (con conciencia plena) a tomar las riendas de su vida con cambios reales,
a interactuar progresivamente con flexibilidad, sentido y equilibrio en la propia vida y dar espacio, jerarquizar, debilitar, distanciar, incluso desactivar, la impulsividad, la inacción, el control que sobre él/ella ejercen los pensamientos, relaciones verbales, que conducen a la evitación y abandono,
ñ) desde aprender la habilidad de validar (observando la igualdad, la constancia, la transcendencia y coherencia del "yo" en distintos contextos y la viabilidad, la supuesta "utilidad", de la experiencia pasada y presente del control, de la lucha, del escape) y de
aceptar compasivamente con la voluntad de experimentar (dispuesto, abierto, a abrazar, sostener o tomar lo que la vida ofrece, a las propias experiencias, tanto apetitivas como aversivas, sin prejuicios, sin apegos, no es resignación, ni rendirse, ni habituarse, ni minusvalorarse, ni hacerse indiferente, diferenciando sentirse "mejor" de vivir mejor)
o) al compromiso activo basado en objetivos con valores, que requiere un autocontrol
(no caer en tentaciones impulsivas), renunciar a la gratificación descontextualizada a corto plazo en pos de resultados significativos a largo plazo, con su implicación, esfuerzo y práctica (autogestión vivencial), del propio cambio (de aquello que se puede cambiar),
p) persistiendo, a pesar de los reforzadores negativos siempre presentes, con voluntad
(evolución experiencial eficiente de su comportamiento público y privado, basado en la confianza en sí mismo, a pesar de las posibles recaídas),
con voluntad, disposición a practicar para convivir, experimentando y tolerando, con eventos eventualmente incómodos, aversivos o desagradables, sin esforzarse luchando con ellos, sin sobredimensionarlos, ni excusas (cayéndose, y volviéndose a levantar),
q) con el sustento reforzante de la clarificación, disponibilidad y conexión (darse cuenta) de sus valores más profundos, los que le dan coherencia a su vida a largo plazo (como brújula), con los que refuerzan las reglas que mantienen la flexibilidad psicológica,
r) contactando libremente, voluntariamente, con la vida que valoran
(con reforzadores, metas y objetivos de amplio cambio a largo plazo, valiosos, motivantes, que realmente le importan y le ayuden a elegir acciones comprometidas para seguir hacia adelante y no quedarse estancado),
s) debilitando intereses y concepciones del yo sin perspectiva (yo conceptualizado, fusionado con los juicios de uno mismo) que interfieren y entran en conflicto con dichos valores (reforzadores negativos con valores reforzantes más pequeños y más inmediatos),
t) en el momento actual (yo, aquí y ahora), con atención flexible y conciencia plena
(darse cuenta de los pensamientos, impulsos, sentimientos, comportamientos que surgen y que enmascaran, y quitan valor a los valores elegidos, mediante la observación y escucha atenta sin juzgar, con la meditación y la focalización, constatando su fugacidad, el incremento inicial de su intensidad y su descenso, su lenta disminución),
u) con flexibilidad más allá del dolor, de los síntomas, del control y peso de eventos pasados y de inciertos futuros
(con perspectiva histórica con un sentido más amplio de uno mismo, separando el observador de las cosas observadas, convirtiéndose en dueño de sus pensamientos y percepciones, sin hiperreflexión con el pasado ni preocupación y miedo en el futuro, sin someterse a los eventos privados),
v) cambiando la interacción con la mente, trabajando mediante la defusión con ella, en lugar de contra ella
(debilitando, disminuyendo la credibilidad y desactivando el apego a los pensamientos automáticos, emociones y sentimientos problemáticos, las reglas inflexibles,
sintiéndolos y experimentándolos únicamente como pensamientos y reglas, sin modificar los distorsionados, o poco realistas, ni el contenido ni las palabras literales, únicamente cambiando su función),
para dar menos poder, menos control, a lo que se piensa de lo que se hace, al yo concepto-contenido respecto al yo transcendente, yo contexto (está bien tener pensamientos, pero solo son pensamientos) ,
w) para ayudar a cada persona (como cliente activo, no como paciente),
con sus desafíos, sus objetivos, en su desarrollo personal, en sus luchas personales con los obstáculos, las dificultades y los problemas presentes en el día a día
x) -sin aferrarse a experiencias pasadas (no es posible intentar arreglar cosas que ya sucedieron), ni etiquetas, sin apegos innecesarios e inútiles, sin esconderse, sin mentir ni poner excusas en situaciones incómodas, sin apartarse, sin intentar controlar, evitar, suprimir, alterar, ni cambiar eventos privados desagradables con verbalizaciones "positivistas", "mágicas" ("querer es poder", "no pienses en ese tipo de cosas", "piensa en positivo", "no es para tanto", "supéralo, otros ya lo hacen"), ni "auto castigos", ni técnicas o herramientas de relajación, reestructuración cognitiva...-,
y) en una reorganización, un ajuste/cambio motivado de su persona en sus contextos, con sus interacciones,
(paulatino, eficiente, guiado por sus valores no por los valores, estándares, percepciones de quienes le rodean)
en el desempeño en situaciones de su vida cotidiana y/o profesional/académica/educativa,
z) desarrollando una voluntad, disposición, abierta, con autonomía, con su identidad elegida, para abordar con alegría y compasión nuevas experiencias, para aceptar y tomar el mando con perspectiva (a través del tiempo y de las situaciones)
para elegir construir rutinas, estrategias y objetivos comprometidos, con probabilidad de éxito (para mejorar el valor y la calidad de su vida),
abandonar libremente el control de patrones de comportamiento, impulsivos, procrastinadores, ineficaces, rígidos, alienantes, literales, etiquetantes, hiperreflexivos y evitativos, pudiendo definirse (¿quién soy?) y redefinirse con perspectiva, continuamente, en cada situación y
experimentar, sentir y abrazar libremente la ansiedad, la tristeza, la soledad, el miedo, la incertidumbre, el dolor,... tal y como son, aprender de ellos y vivir mejor al hacerlo, alineado con sus valores.
José Javier